Un «souvenir»? Que nacionalidades lideran el ranking de objetos robados en hoteles

Se realizan miles de encuentas sobre el turismo al año, algunas de ellas bastante curiosas. Por ejemplo, «Quienes son los viajeros que más objetos roban en los hoteles?»

El estudio, realizado por Hotels.com sobre 5.000 viajeros a nivel mundial, señaló que los argentinos son los más propensos a llevarse objetos de sus habitaciones, o al menos los que más lo admiten. El podio lo completan los huéspedes de Singapur en el segundo lugar y los españoles en el tercero. Alemania, Irlanda, Rusia, México, Italia, Japón y Estados Unidos completan el top ten

Y hasta confiesan los mejores trucos para no levantar sospechas, como hacer desaparecer en un descuido alguna toalla, albornoz, o pequeñas botellitas de licor directamente del carrito de la limpieza en el pasillo, mientras la empleada está dentro de la habitación. O también llevarse piezas de vajilla o cubertería de las bandejas del room service que dejan en el pasillo otros clientes tras haber sido utilizadas

El minibar es también una tentación. No es infrecuente que algún cliente consuma una botellita de ginebra o vodka y la rellene de agua, cuidando de dejar bien disimulado el tapón de rosca que las cerraba. En algunos minibares hay ya un sistema electrónico que registra automáticamente en la cuenta del cliente el uso de cada botellita al sacarla del estante.

Aquí el TOP 10 de objetos más robados de las habitaciones, por orden de desaparición:

1. Amenities del cuarto de baño. No se consideran dentro de la encuesta, ya que se da por hecho que mucha gente se las llevará. Además, es una excelente herramienta de marketing para el hotel tener amenities distrubuidos en miles de casas
2. Toallas. Aquí empieza la infracción. No son consideradas souvenirs
3. Batas de baño de las grandes cadenas, que para el viajero son como un trofeo de guerra.
4. Bombillas de luz y pilas de los manos a distancia!
5. Objetos de papelería: bolígrafos, libretas, revistas, guías… y hasta biblias!
6. Botellas del minibar. A veces se las llevan llenas, otras se las beben y rellenan con agua para camuflar.
7. Piezas de cerámica, perchas, cubiertos, vasos y copas.
8. Almohadas y edredones.
9. Otros objetos del baño, como toalleros, secadores de pelo, espejos, etc.
10. Aparatos eléctricos: planchas, relojes, apliques, DVD´s

Sin embargo hay gente que no se anda con tonterías. Hay robos muy famosos en la historia de los hoteles. Les dejo a continuación la lista de los mas increíbles:

• Una obra U$300.000 de Andy Warhol, robada en el W Hong Kong.
• Un modelo de avión Concorde de 3.5 metros, robado de un hotel Best Western
• Un piano de cola de 250 kilos. El ex gerente de la cadena Starwood, Colin Bennett, contó al Telegraph que tres personas vestidas con monos de trabajo entraron al lobby del hotel, cargaron el piano en un camión y se lo llevaron ante la mirada de los empleados que pensaron que era un trabajo de rutina.
• La cabeza de un jabalí. En el Hotel du Vin en Birmingham un invitado fue sorprendido tratando de robar una cabeza de jabalí que estaba colgada en la sala de billar
• El minibar textualmente: Mucha gente lo vacía y se lleva las botellas, pero un huésped en un hotel de cinco estrellas en Dubai dejó las botellas y se llevó la nevera

Y los que menos roban? Parece ser que esta honrosa posición se la llevan los huéspedes colombianos, de los que sólo el 31% admite poseer algún objeto extraído de un hotel. A estos les siguen, en los últimos cinco puestos del ránking, los huéspedes de Noruega, Corea del Sur, Hong Kong y Dinamarca

Yo, que soy argentino de nacimiento y español de adopción, a priori seguramente represente un peligro latente para cualquiera de los hoteles en los que me hospedo. Sin embargo, no suelo tentarme con las amenities, aunque admito mi responsabilidad directa en la desaparición de un elevado número de bolígrafos, un cenicero y una toalla, que utilicé una vez para proteger una botella de vino en mi maleta.

Mi hurto más sonoro fue una manta que “tomé prestada” en un hotel del aeropuerto de Miami, para armarle una cama a mi hijo, entonces bebé, en el suelo del avión en un vuelo transatlántico.

Alguna vez te llevaste algún «souvenir» de un hotel? Estas dispuesto a confesar? Puedes hacerlo en la sección de comentarios abajo 😉