El pasado domingo, alrededor de las 22hs, un avión de Ryanair proveniente desde Sevilla aparcó en su finger del aeropuerto de Barcelona. Segundos antes del desembarque, la manga subió sin control más de la cuenta y el calzo situado en la parte baja arrastró a su paso a la puerta de la aeronave, que había sido abierta en ese instante
Un fallo del sistema de autonivelación del finger hizo que la puerta, que acababa de ser abierta para el desembarque, fuera prácticamente arrancada de la aeronave provocando gravísimos daños
Fuentes aeroportuarias señalan que no se produjo herido alguno durante el incidente. Una ambulancia acudió al lugar de los hechos en cumplimiento del protocolo de emergencias establecido para este tipo de casos
Menos mal que no había comenzado el desembarque, o las consecuencias podrían haber sido muchísimo peores.