Tracey Curtis-Taylor ha concluido su expedición aérea en Sidney, tras recorrer en solitario durante tres meses los 27.000 kilómetros que separan el aeródromo británico de Farnborough en Inglaterra y el aeropuerto de la ciudad australiana con un biplano de 1942. La piloto declaró que el viaje había sido “una gran aventura” con la que quería homenajear la expedición que en 1930 realizó la piloto británica Amy Johnson, recordando que ha usado la misma ruta. Tracey ha tenido que sobrevolar 23 países y repostar en 50 ocasiones, durante 93 días!
La ruta se realizó atravesando Europa en dirección al Mediterráneo, y de allí a Jordán, el desierto de Arabia, el Golfo de Omán, Pakistán, India, Myanmar, Tailandia y Malasia para acabar por Indonesia, Timor y el Mar de Australia.
El vuelo lo ha realizado en un Boeing Stearman fabricado en 1942 y restaurado que lucía en el fuselaje el emblema «Spirit of Artemis».
Y esta maravillosa foto de su llegada al aeropuerto de Sydney. Brava y valiente!